Numeración

El fin de semana pasado estuvimos 5 días de visita en Praga.  Nos encontramos ahí con Germán, que actualmente está haciendo un doctorado cerca de París, y tenía ganas de conocer Praga, al igual que nosotros. Entre las fotos de Germán y las nuestras son más de 300, así que en lugar de hacer como otras veces un post kilométrico tratando de contar todo junto y después quedarme sin tinta hasta el próximo viaje, voy a ir haciendo posts separados, contando distintas cosas.

Una de las cosas que nos llamó la atención paseando por Praga, es que todas las casas tenían 2 números, uno rojo que indicaba el número de casa dentro del barrio y podía llegar a números muy altos para lo que son los números en Europa (llegamos a ver más de 2000, algo inusitado de este lado del Atlántico) y otro azul que indica el número correspondiente a la calle, más acorde al sistema de numeración típico de por acá.

Cuando vimos esto, yo imaginé que originalmente las casas tenían un número por barrio (abajo del número rojo casi siempre aparece el nombre del barrio), pero que esto era demasiado caótico, por lo que hace algún tiempo habrían instaurado los números por calle y que por algún período convivirían los dos sistemas.  Jugamos a adivinar hace cuánto estaban los números y por cuánto tiempo sería la transición.


Germán arriesgó que estaban hace 7 años y que eran 15 años de transición.  Yo, pensando que las cosas van más rápido, dije que estaban hace 5 años, y que eran 10 años de transición.  Finalmente, Maxy afirmó contundentemente que estaban desde siempre y para siempre.


Aunque parezca increíble, Maxy fue el que más cerca estuvo de la verdad (no porque Maxy no tenga razón habitualmente, sino porque a mí me parece una locura tener dos números).
Los números por barrio fueron otorgados en 1770, mientras que los números por calle en 1860. Desde entonces conviven ambos números y no hay ninguna intención de eliminar los números barriales. De hecho, se han hecho varias reasignaciones de números, pero siempre manteniendo la doble numeración.
Más info en este artículo de la wikipedia.

Otra cosa loca es que en algunos lugares el número rojo en lugar de estar con el cuadradito tipo placa, está pintado a mano, directamente sobre la pared del edificio.

Como habrán podido notar de las fotos, en las que no sólo están los números de edificios sino también las decoraciones alrededor de las puertas, Praga es una ciudad en la que los edificios están extremadamente decorados.


No sólo sobre las puertas, sino también en las esquinas.


Otra cosa que nos pareció muy simpática fueron los carteles de tránsito.  A diferencia de los típicos carteles fríos que uno está acostumbrado a ver, los carteles en Praga son casi caricaturezcos.


Muy gracioso que a las niñas las dibujan con moño en la cabeza, y a los hombres siempre con sombrero.


Y eso es todo por ahora sobre Praga. Sigo en el próximo post.