jueves, 29 de agosto de 2013

Emulación

En Alemania los asados no son como en Argentina.

Nosotros calculamos medio kilo de carne por persona.  El asado lo acompañamos con una o dos ensaladas de verduras, que son sólo una pequeña guarnición frente a la porción de carne.

Los alemanes son bastante fans del "grillen" que es como se llama el equivalente alemán del asado, y si bien existen las parrillas a gas, todos saben que la verdadera forma de hacer asado es con carbón. Hasta ahí todo bien.

La principal diferencia está en el tamaño de la parrilla y la cantidad de carne por persona.

Parrilla repleta, durante el asado organizado por Google
Todas las parrillas que hemos visto (y vimos unas cuantas, no es algo raro) han sido como la de la foto. Redondas y de un diámetro aproximado de 40cm.

La primera vez que fuimos a comer "asado", fue para el cumpleaños de uno de mis compañeros de trabajo.  Nos había invitado a una barbaque a las dos de la tarde.  Para nosotros esto era una gran duda: en Alemania se almuerza temprano, si te invitan a un asado a las dos, ¿es a almorzar o a cenar? No sabiendo la respuesta, nos tomamos una sopa antes de salir, como para tener algo en el estómago si había que esperar, pero tener lugar en el caso de que la invitación fuera a almorzar.
Resultó ser que primero hubo café con tortas (así que por suerte no nos morimos de hambre), y a eso de las cinco de la tarde empezaron a hacer el asado que comimos tipo seis (sí, acá se cena muy temprano).

Cuando yo vi el tamaño de la parrilla y la cantidad de gente que éramos (del orden de 12 personas), no me explicaba cómo es que con esa parrilla íbamos a poder comer todos.

Hasta que entendí el secreto: cuando llegó el momento en el que estaba la carne, empezaron a traer a la mesa boles enormes con ensaladas, pero nada de verdura, sino ensalada de papas, ensalada de fideos, panes saborizados, y otros carbohidratos.  Ni una lechuga, ni un tomate.

El asador iba trayendo a la mesa los trocitos de carne que iban saliendo, pero eran cuatro o cinco trocitos, y todos chicos (una brochette, un matambrito, cosas así).  La primera ronda, por sentirnos extranjeros y fuera de lugar, no nos servimos, dejando que se sirvan primero los demás, esperando a la siguiente tanda, y comiendo un poco de ensalada de papas mientras tanto. Cada cinco o diez minutos llegaba una nueva tanda, pero siempre de pedacitos chicos y que no alcanzaban para todos.  A la tercera vez, comprendí que no íbamos a poder calmar el hambre con la carne, sino que sólo era un lujo para ponerle más onda a los carbohidratos.

En el caso de este asado, la carne estaba macerada para hacerla más suave, y saborizada con sal y especias.  Queda muy rico, pero yo no podía evitar pensar que todo eso en Argentina no hace falta porque tenemos carne tierna y jugosa.

Maxy tratando de demostrar argentinidad

El asado de Google (un asado al que invitaron a toda la oficina incluyendo parejas e hijos) fue diferente, principalmente porque en este caso había mucha carne (acá es un lujo increíble tener tanta carne de vaca).  Pero las parrillas eran del mismo tamaño.  Una parrilla de las de la foto por cada mesa de 15 a 20 personas.

La forma de hacer rendir esta parrilla es cocinar todo muy rápido de modo que la carne vaya saliendo y dejando lugar a la siguiente tanda.  La carne la tenían en bandejas, cortada muy finita, como si fueran milanesas; cuando repartieron las parrillas, repartían las brasas que las habían preparado en otro lado, súper encendidas, al punto que unas gotas de grasa levantaban llamas que llegaban hasta la carne.

Aún con el sistema de cocción extra rápido de carne finita y brasas en llamas y con la cantidad increíble de carne que había, las mesas estaban llenas de otras cosas para acompañar la carne, porque acá el asado se come así, con muchísimas otras cosas que son las que llenan, y la carne como un adicional.

Hay que notar que tan fanáticos son los alemanes de hacer asado, que en una fiesta corporativa en la cual se gastó mucha mucha plata, repartían parrillas y bandejas de carne, para que los que tuvieran ganas se encargaran de asar para su mesa.  En nuestra mesa iban rotando, y un ratito estuvo Maxy, tratando de asar un poco más despacito, hasta que se le amontonaron los comensales que querían su porción que no salía más.

Nosotros no somos terribles fanáticos del asado, pero definitivamente nos gusta más el argentino :).

miércoles, 28 de agosto de 2013

Jerárquico

Muy cerca de Munich queda un castillo llamado Neuschwanstein, también conocido como "el castillo de Disney", supuestamente por haber sido la inspiración para ese castillo.


Hacía casi un año que estábamos viviendo acá y aún no habíamos ido a visitarlo.  Turistas de visita nos preguntaban si valía la pena y no sabíamos que contestar.  Finalmente, cuando vino Gastón desde Berlín a pasar un fin de semana, decidimos ir a conocer el famoso castillo.

martes, 27 de agosto de 2013

Perturbación

Cuando hace calor la gente se pone un poco loca.  En Buenos Aires es la locura de las fiestas, seguida del éxodo a la costa en Enero.  En Munich la locura es distinta, pero es en definitiva es el calor que nos vuelve locos.

A mediados de junio, después de un par de semanas de días lindos de unos 25 grados, la temperatura subió de golpe a más de 30 grados.  Era lunes y en período escolar.  A la tarde volviendo a casa, me encontré con gente caminando en malla o bikini por la ciudad, y gente metida en el río en partes que yo pensaba que no eran para meterse (baden verboten y todo eso).

En particular, una parte del Englischer Garten por la que cruza un canalcito y tiene mucho pasto alrededor se había convertido en el equivalente de la Playa Bristol de Mar del Plata, no cabía un alfiler.

Foto sacada del sitio muenchen.de
Era como que ese día era el verano y había que disfrutarlo a como diera lugar. Aunque en realidad no fue un día solo, fue una semana entera con máxima por arriba de 30 grados, la gente siguió metiéndose a cuanto hilo de agua hubiera, pero ya no me encontré gente en bikini fuera del parque.

Pasada esa semana, hubo una semana fresca, en la que hacía más calor en Buenos Aires que en Munich, y luego volvieron las temperaturas agradables, rondando los 25 grados.  En algún momento pensé que el pico del verano ya había pasado y que el resto de los días serían más bien templados.

A mediados de julio, para mi sorpresa, volvió el calor de la locura.  Otra vez 30 grados, y otra vez la gente paseando en bikini y metiéndose en cuanto charquito encontrara, que encima eran cada vez más chicos porque por tres semanas no había llovido ni un solo día.

Así fue que nos encontramos con una nueva forma de locura: los chicos que se tomaban el tranvía en malla.  Al principio no entendíamos del todo como funcionaba, pero después de un par de semanas de 30 grados de máxima, lo llegamos a entender.


El mapa muestra el recorrido que voy a explicar a continuación.  En la esquina inferior izquierda, debajo de donde dice Eisbach es "la ola", el agua pasa por ahí a mucha velocidad justamente para que se pueda formar la ola.  Lo que la gente hace es que se mete al canal más o menos en la zona donde empieza el color celeste, y se deja llevar por la corriente hasta donde termina el celeste.

La gente dejándose llevar por la corriente, en medio del canal
No es que ahí termine el canal, ni que sea el único canal, sólo resalté el recorrido más transitado, tanto por munichenses como por turistas.  Lo que tiene de especial el punto en el cual termina el resaltado es que hay allí una parada de tranvía, que pasa cada 10 minutos y tarda 3 minutos en llegar hasta "la ola".

En definitiva, durante la tarde entera la gente (al principio eran chicos pero después de dos semanas de calor, la locura ya era generalizada) se mete a la corriente, se deja llevar por un kilómetro, sale, espera el tranvía, y entre 3 y 13 minutos después vuelve a repetir el recorrido.

El final del canal resaltadoLa parada del tranvía del lado de enfrente
Claramente, viajan todos sin boleto (quien sabe, tal vez tienen el boleto comprado junto con sus cosas, que la gente deja tiradas en algún lugar en el parque, muchas veces sin que haya nadie cuidándolas). Igualmente, dada la masificación de este pasatiempo estival, no sería posible para un inspector hacer algo al respecto (¿Qué se hace con un tranvía con 30 personas en malla, sin boleto ni documento?)

Finalmente, después de tanto ver a la gente dejándose llevar por la corriente, sucumbimos nosotros también a la locura, el fin de semana que estaba Gastón de visita desde Berlín.  No hicimos el trayecto completo de un kilómetro, sino que nos tirábamos al agua por unos cien o doscientos metros y luego volvíamos caminando.

Gastón y Maxy a punto de meterse en la corriente
No voy a negar que era divertido.  Aunque a mí personalmente me costaba mucho dejarme llevar, tengo una personalidad muy controladora y que sea la corriente la que controle mi movimiento me resulta difícil.


lunes, 26 de agosto de 2013

Pseudo-trigal

Actualización: cambié el título del post porque mamá me retó que el trigo no es una leguminosa (yo ya sabía, pero me gusta la palabra leguminosa), y además, hemos puesto en tela de juicio la naturaleza del cereal cultivado.

Yo imagino que quien haya vivido en el campo lee mis posts sobre el campo de enfrente de casa y se burla de cuán bicho de ciudad soy, que le saco fotos al campo para ver como crece la siembra.  Pero no me importa, a mí me gusta igual :).

La última vez que escribí al respecto del campo de enfrente, parecía ser simplemente pasto:

9 de mayo
Pasó un mes hasta que finalmente el pasto empezó a echar espiguitas

9 de junio17 de junio
Y otro mes más en el cual de a poco fue poniéndose un poco más amarillo, pero no del todo; ya a esta altura nosotros estábamos convencidos de que era, como algunos habían supuesto en su momento, trigo.

9 de julio
Hasta que finalmente, el 9 de julio (justo después de estas fotos) pasó la máquina cosechando.


La foto muestra cómo la cosechadora iba echando el cereal cosechado al container de atrás, ese día había viento, y una cantidad no despreciable de lo cosechado caía afuera.  Más adelante, cuando ya tenían más lugar para moverse por lo ya cosechado, el tractor con el container iba al lado de la cosechadora, evitando tanto desperdicio.

A la tarde, ya estaba todo cosechado:


No todo en realidad, habían quedado algunas pocas espigas que la máquina no se había llevado, y unos días después no estaban más.  No sé si las habrán cosechado manualmente o si alguien se lo habrá llevado para hacer su propia harina.


Es llamativo que al ver estas espigas sueltas se las ve bien verdes, pero cuando daba el sol en el campo se lo veía más o menos amarillo.  Igual no tan amarillo como yo me esperaba que fuera un campo de trigo justo antes de cosechar.

De recuerdo me traje una espiguita de las que no había caído en el container, que estaba cortada y caída en el suelo. El primer día estaba todavía un poco verde, pero luego se puso bien amarilla.


Una de las cosas que más me sorprende de toda esta historia es el tiempo que pasó desde que se plantó el cereal hasta que finalmente fue cosechado.  Lo plantaron a fines de octubre; pasó todo el invierno debajo de la nieve, con sólo unas puntitas verdes asomando debajo de la capa blanca; cuando la nieve se fue en marzo, muy rápidamente adquirió altura, pero tuvieron que pasar tres meses más hasta que floreció.  En total fueron casi 9 meses entre siembra y cosecha.

Actualización: yo estaba convencida que era trigo, pero me lo cuestionaron así que estuve investigando (es decir, buscando en google images) las espigas de trigo, cebada y centeno.  Resulta que hay muchos trigos distintos, cada uno con su pequeña variación de espiga, y además están la cebada y el centeno que se parecen mucho al trigo.  Existe, incluso, una especie híbrida entre trigo y centeno llamada triticale.  En definitiva, podría ser cualquiera de estos cereales, a menos que le pregunte al dueño del campo, dudo que lo vaya a poder saber con certeza.

En seguida después de la cosecha, pasaron con una máquina que echaba tierra y araba al mismo tiempo, fumigaron (o hicieron alguna otra cosa que generaba muy feo olor) y unos días después -creemos- volvieron a sembrar.  Si no es siembra, son unos yuyos que crecen como locos.

3 de agosto24 de agosto
En la segunda foto se ve que en medio de los pastos hay unas plantas con hojas más grandes.  Aún no sabemos si todo el pasto se va a poner así, o si uno de los dos es un invitado no deseado.

domingo, 25 de agosto de 2013

Evolutiva

Hace unos 20 días finalmente terminé los Pokemones que tenía encargados.  Hice en total 8, 7 por encargo y 1 por error :).

A continuación una foto de cada uno, con el enlace a la página correspondiente en Ravelry (el sitio de donde saco los patrones, donde voy guardando las notas de los cambios que les hago, y donde hay más fotos de cada uno).

Psyduck Snorlax
Cyndaquil Meouwth (Miau)
Mew Pichu
Piplup Squirtle

Y acá una foto de los 8 juntos:


No sólo he estado haciendo Pokemones.  También hice un dragón de los de The Song of Ice and Fire:

Rhaegal

Un Cardinal de los Angry Birds

Cardinal
Y algunas cosas más...

Con la saga de pokemones concluida, acepto nuevos encargos de cosas para hacer :)

Rugosidades

En Alemania se está terminando el verano y durante todo este tiempo no hemos publicado nada.  Voy a echarle la culpa al sol y al calor que hacen que uno tenga menos ganas de sentarse delante de la computadora y más ganas de salir a disfrutar de los días lindos.

Y ahora que llueve y está poniéndose fresco de nuevo (pleno mediodía y hacen 15 grados), me dedicaré a contar y publicar fotos de lo pasado en el verano, empezando por lo más reciente.

Las semanas pasadas estuvimos en la DebConf13.  La conferencia anual de Debian, a la que habíamos ido numerosas veces (6 para ser exactos), pero nos habíamos perdido las últimas 2 ediciones.

Esta vez se hacía en Suiza, en un pueblito en el medio de la nada llamado Vaumarcus, a 50km de Lausanne.  Lo más espectacular del lugar era la vista al lago Neuchatel.



El lugar donde era la conferencia era más un complejo para boy scouts o similar que un centro de conferencias.  Mucho espacio al aire libre (cancha de voley, de fútbol, mesas de ping-pong, tirolesa, pared para trepar y un coso para hacer equilibro); el alojamiento era en habitaciones con baños compartidos entre todos los del mismo piso; y en general muy pocos enchufes.


Yo temía que lloviera, porque si llovía realmente se complicaba mucho el traslado de un lugar al otro.  Pero tuvimos mucha suerte con el clima, casi todos los días soleados. En los diez días que estuvimos ahí, sólo un día llovió a la tardecita y no duró más que unas horas.


El miércoles en medio de la conferencia es el DayTrip, un día en el que no hay charlas y uno sale a pasear y socializar con el resto de los geeks.  A la mañana hicimos un trekking corto, hasta un cañón bastante profundo, que los suizos llamaban "nuestro pequeño cañón del Colorado".


A la tarde paseamos y cenamos en un barco que nos llevó a través del lago Neuchatel.

La conferencia en sí estuvo aceptable, aunque para nuestro gusto había demasiadas charlas no muy interesantes.  Lo más interesante que saqué yo personalmente fue conocer gente nueva y juntar algo más de energía para trabajar en el proyecto de Debian Women.

Tan en el medio de la nada está Vaumarcus, que la estación de tren casi no se usa.  Para llegar y salir del lugar, había que tomarse un bus hasta Yverdon-les-Bains (la ciudad más cercana con estación de tren).

Domingo 10:11, esperando el bus de regreso.
El viaje de vuelta llevó algo más de 8 horas, desde que nos tomamos el bus en Vaumarcus, hasta que llegamos a casa en Munich.  Un viaje bastante largo teniendo en cuenta lo cerca que estábamos (menos de 500km), pero muchísimo más corto que la mayoría de los viajes a DebConf que hemos hecho.

lunes, 17 de junio de 2013

Euforia

Finalmente el domingo 2 de junio llegó el motivo por el cual elegimos ir a París en primer lugar: ¡Roland Garrós!


Rodrigo y yo, que somos los fanáticos del tenis, nos fuimos temprano a la mañana para el torneo, mientras Maxy y Germán se fueron a conocer el Louvre que por ser primer domingo de mes era gratis (pero eso les contará Maxy en otro post).

domingo, 16 de junio de 2013

Opulencia

El sábado 1 de junio, fuimos a pasear por los jardines de Versalles, con Rodrigo.



Presunciosa

Estuvimos en 5 días en París hace dos semanas.  El post al respecto se hizo esperar porque a la vuelta del viaje a Francia no sólo me encontré con muchísimo trabajo atrasado, sino que tanto Maxy como yo estábamos extremadamente cansados.  Ahora, un poco más repuestos, va el relato de los días que pasamos en la ciudad luz.


lunes, 20 de mayo de 2013

Reputación

Uno tiene esa sensación de que los alemanes son fríos y serios (porque lo son).  Pero cuando se trata de festejar, los alemanes dejan de lado la frialdad, y pueden ponerse a cantar subidos a las sillas o a las mesas, usando largas mesas compartidas y vestidos de forma ridícula, particularmente acá en Bavaria.

El ejemplo más conocido es el del Oktoberfest. Pero además de la mega fiesta que todo el mundo conoce y que está repleta de turistas, hay otras más chicas a lo largo del año.

Cuando vinieron Lucas y Lucía, durante cuaresma, fuimos a la fiesta de la cerveza fuerte (Starkbierfest).  La leyenda cuenta que unos monjes, que tenían que ayunar durante la cuaresma, idearon esta cerveza especial para consumirla en lugar de comida, tiene más contenido sólido y más alcohol.  No sé si será cierto, pero lo que es seguro es que durante cuaresma las cervecerías locales fabrican una cerveza más fuerte y los fines de semana organizan festejos, muy en el estilo del Oktoberfest, aunque son en los locales grandes de las cervecerías, no en un lugar común.

Starkbierfest en Augustiner Keller

lunes, 13 de mayo de 2013

Entusiasmo

Como todos saben, mientras en Argentina es otoño, acá en Alemania es primavera.  Esto puede resultar una obviedad: todos sabemos que al sur del Ecuador las estaciones están al revés, ¿Verdad?

En verano e invierno es particularmente evidente, porque de un lado nieva y del otro hace calor.  Pero tanto se hizo esperar la primavera en Europa este año, que yo varias veces me encontré sintiendo que estábamos en otoño.  El mayor exponente de este error fue que en marzo vi unas verduras congeladas que decían "verduras de otoño" y las compré ¡pensando que eran de estación!

Pero ya estamos en mayo y con el cambio de mes llegó finalmente la esperada primavera, tuvimos varios días de temperaturas rondando los 20 grados (aunque hoy la mínima es de 4 °C), salió el sol, y todo se puso extremadamente verde.  Calculo que ya no me voy a confundir de estación.

El domingo pasado fuimos en bici a tomar unos mates al Englischer Garten.


El camino estaba lindísimo, muchos canteros con flores sobre las veredas, y lleno de árboles en flor por las calles.  Realmente daba mucho gusto andar así.

domingo, 12 de mayo de 2013

Ex-Comunistas

Las fotos de este post fueron sacadas por Germán, que siempre que va de viaje lleva su mini-trípode, para sacar fotos de larga exposición; no tienen mucho que ver con lo escrito, pero sirven para darle color al texto.

Este es el último post sobre Praga que haré, al menos hasta que vuelva a ir en septiembre, para la semifinal de Copa Davis. Y es un post más informativo que viajero, para comprender un poco la historia de Checoslovaquia, que hasta este viaje para mí era una gran incógnita.



lunes, 6 de mayo de 2013

Pandemónium

Este post lo había prometido para "hoy", pero se me pasó la hora a la que salen los mails, así que a quienes lo leen por mail les llegará mañana. Este post incluye fotos propias y fotos sacadas de las noticias.

El lunes era el tercer día que estábamos en Praga, habíamos decidido ir al Museo Judío (que más que un museo es un barrio entero con distintos edificios para visitar) por la mañana.

A eso de las 9:30, cuando todavía estábamos terminando de alistarnos para salir, sentimos un viento muy fuerte golpear contra las ventanas del departamento.  Yo pensé que era que se había levantado viento de golpe.  Sábado y domingo había estado lloviendo, y no me parecía descabellado que el lunes se levantara mucho viento.  Germán pensó que era un trueno, también asociándolo a la tormenta.  Maxy estaba en el baño, así que no lo escuchó.

Al rato terminamos de preparar todo y salimos.

Foto del sábado del puente que teníamos que cruzar para ir a la ciudad

domingo, 5 de mayo de 2013

Centrifugado

Este post es un salteado de cosas variadas relacionadas con Praga, sin demasiado ton ni son.  Algunas de las fotos las sacamos nosotros y otras Germán, que tiene una cámara con gran angular.


viernes, 3 de mayo de 2013

Numeración

El fin de semana pasado estuvimos 5 días de visita en Praga.  Nos encontramos ahí con Germán, que actualmente está haciendo un doctorado cerca de París, y tenía ganas de conocer Praga, al igual que nosotros. Entre las fotos de Germán y las nuestras son más de 300, así que en lugar de hacer como otras veces un post kilométrico tratando de contar todo junto y después quedarme sin tinta hasta el próximo viaje, voy a ir haciendo posts separados, contando distintas cosas.

Una de las cosas que nos llamó la atención paseando por Praga, es que todas las casas tenían 2 números, uno rojo que indicaba el número de casa dentro del barrio y podía llegar a números muy altos para lo que son los números en Europa (llegamos a ver más de 2000, algo inusitado de este lado del Atlántico) y otro azul que indica el número correspondiente a la calle, más acorde al sistema de numeración típico de por acá.



miércoles, 24 de abril de 2013

Agricultores

Finalmente, después de tantas quejas, podemos decir que llegó la primavera.  Tuvimos algunos días del tan extrañado sol y las cosas se empiezan a ver más verdes.  Es impresionante como en unos pocos días florecen los árboles.

Este es el árbol que se ve de la ventana del living, floreciendo a lo largo de las últimas dos semanas:

11 de abril 15 de abril
24 de abril
Estos son los árboles de una casa vecina, que da contra el campo:

11 de abril 24 de abril
En las fotos se nota también que hoy tuvimos celeste en el cielo, que es algo que pasado este invierno he aprendido a no dar por sentado.

Por último, continuando la tarea detectivesca del blog, unas fotos del pasto de enfrente que por ahora suponemos trigo.

11 de abril 24 de abril
La foto no es del mismo lugar exacto, no es que surgieron pastos de los huecos, pero en la versión grande debería notarse la diferencia de longitud.
Fue muy impresionante como en el momento que se derritió la nieve y salió el sol, los pastos empezaron a crecer con una fuerza insospechada, luego de haber estado tres meses con la misma longitud.

La latitud acá es de 48 grados, mientras que en Buenos Aires es de 34.  Esa diferencia hace que en invierno se hiciera de noche mucho más temprano  (era imposible volver a casa de día), pero que ahora en primavera no deje de asombrarme lo tarde que se va el sol.  Hoy hubo luz hasta pasadas las ocho y media de la noche, y todavía faltan dos meses para el día más largo.